Un colibrí

Gotas de agua,
caen como lluvia,
reposan serenas,
sobre las hojas del café.
La mañana florece
y el sol sonríe,
la lluvia refresca,
y el verdor revive.
Un colibrí se levanta,
de su siesta,
sus alas deprisa
lo llevan donde quiera.
El aroma del polen,
llama su atención,
y con rápido aliento,
empieza su labor.
Una madre contenta
contempla alguna flor,
y en su patio un pajarito
la llena de emoción.
Deja un lado su café
y observa con amor.
En la naturaleza
aquella madre
encuentra su pasión.
Una tarde en Boquerón
contempla el derredor.
Un pajarito cantor,
despierta su atención,
y una sonrisa pequeña
reconforta su corazón.